Esta es una historia real. Le sucedió al amigo de un amigo.
No, la verdad, me sucedió a mí.
Ok, acepto que en diferentes ocasiones me han dejado por otra. Y esa no es una historia que pienso contar ahora. Pero esta es la primera vez que alguien me cambia por una obsesión con una historia de un par de mujeres que él cree que son lesbianas. Esa es una historia para contar a los nietos.
"Ay hijito, yo recuerdo cuando a mi amigo con beneficios le agarró una obsesión por una chica que el creía que era lesbiana. Y yo no podía hacer nada porque estaba a kilómetros de distancia".
Si mis abuelos me salen con historias como esas juro que tengo pesadillas por el resto de mi vida.
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