Soy fanática de ver películas, series, televisión en sí ... puedo realmente gastar el tiempo mirando cosas sin sentido y hasta a veces, puede que ni siquiera las mire, sino que el simple hecho de saber que está sonando algo de fondo mientras hago algo más es reconfortante. Como en este momento en el que sex and the city (disco 2, temporada 4) está en mi windows media player pero yo estoy escribiendo esto.
El único problema que le he encontrado a la televisión, series, películas, etc, es que ahora nos ponen mucho esta imagen del chico malo (el rebelde, el que no le hace caso a nadie, el que es bruto pero a la vez popular y a la vez se burla de los nerds, el que se acuesta con mil tipas porque de alguna forma tiene un poder seductor único, etc) que de pronto, por arte de magia (o alguna sesión espiritista) tienen un corazoncito ahí oculto, listo para hacer pum-pum y secretar maripositas al estómago. De pronto te ponen la imagen que el chico malo también se enamora (y llega a ser tiernísimo).
Ejemplos de estos casos (por mencionar algunos) son:
Charles "Chuck" Bartholomew Bass: (y aquí viene una pregunta que no tiene nada que ver con el tema, pero, ¿por qué es que todos estos hijos de alguien, normalmente dentro de las grandes élites, tienen estos nombres tan antiguos y coloquiales como "Bartholomew" o "Nathaniel"?) Chuck es el gran hijo de su mamá, cuyos amigos solo son sus amigos porque obviamente, su daddy es Bart (Bartholomew) Bass y vive en el Upper East Side. Las ambiciones de Chuck siempre fueron: dinero y sexo. ¿Qué más puede pedir el hijo de Bart Bass? Hasta que de pronto, algo raro pasó en él. Y se enamoró. Se convirtió en este ser, aun con poder, que vive en un hotel en el Upper East Side, y que camina de la mano de Blair Waldorff. Y es feliz. Después de esto, ¿quién no ha dicho "quiero un Chuck Bass-tard?". Ah cierto, Chuck es el personaje ficticio de Gossip Girl (
just in case).
Noah "Puck" Puckerman: La presión social me llevó a ver Glee, de lo cual me enorgullece decir que no estoy afanada, y por lo menos me dio a conocer a Puck, otro ejemplo más. El típico caso del jugador de fútbol americano, churro (por qué negarlo) que tiene un mohawk, bruto (y por ende se respalda del fútbol), que se trata de acostar con todo lo que camina (y luego encontró un gusto por las mujeres mayores, leánse "mamás") y se burla de los gLee kids tirándoles una especie de jugo o lo que sea que les tira. Hasta que de pronto se da cuenta que este individuo también tiene sentimientos (aunque a veces por más de una). ¿Qué mejor manera de poner que el chico churro que se sextea con las porristas es tierno y tiene corazón e incluso hace un solo para demostrar sus sentimientos, que creando al personaje de Puck? Y hay gente que dice (como la amiga de mi hermana) "
es un macho que dejaría que me pegue".
Robert Pattinson en "Remember Me": Hace poco ví una película donde salía este broder, otro caso más para mi post. No recuerdo el nombre de su personaje, pero este chico es el rebelde, el que su papá es alguien de poder pero como no le hace caso entonces es el chico "no necesito de la ayuda de daddy". Y aquí sucede lo mismo que siempre, nos muestran al chico rebelde que de pronto descubre que el amor puede lograrlo todo (incluso hacer que lave sus platos).
¿Cuál es, entonces, el problema de esta nueva imagen que te muestran? Que te dan a pensar que entonces todos los chicos malos al final se enamoran, que tiene su corazoncito y que pueden darte el más intenso "romance" que puedas pedir (cursilería incluída). Entonces, te armas de valor, te pones tu mejor vestido, sales a la calle, buscas un par de patanes, buenos para nada, mal hombres y te enamoras (total, ellos también pueden hacerlo). ¿Qué es lo que sucede?
Reality hits your face darling. El patán, sigue siendo patán. El malhombre sigue siendo un malhombre. Lo que hacen es jugar contigo, coger tu corazoncito (y cogerte a ti también dicho sea de paso) y hacerlo trizas. Y sí, es cierto, se enamoran. Pero no de tí.
Tampoco digo que todos los chicos del mundo sean unos chicos malos, no, hay los buenos también. Y esos también están en la televisión. Como Aidan (de sex and the city, serie que he vuelto a ver en versión season marathon, y ya no me está haciendo bien). ¿Cuál es el problema de ponerte a Aidan en la mira? Que también vamos en la búsqueda de ellos. Como si existieran. Pero en su lugar encontramos a los chicos malos. Pero como ya expliqué, los aceptamos (culpa a la TV, y al cable).